Los choques ante Industriales siempre tienen miga. Alto nivel, tensión, dureza, más si cabe en los últimos años donde las victorias se han repartido entre los vecinos de Las Rozas y el equipo masculino del Club de Rugby Majadahonda. El pasado domingo se vivió uno de esos duelos que dan para mucho. En esta ocasión la victoria fue para los locales por 40-20 pero pese a lo abultado del marcador, cabe destacar el buen trabajo del conjunto de rojo y azul ya que hasta pasada la mitad de la segunda parte, mandaba en el marcador.
El encuentro comenzó con un juego muy igualado y, pese a que fue Industriales quien anotó el primer ensayo, Majadahonda tuvo varias oportunidades previas cerca de la zona de marca, destacando buenas acciones de jugadores como Ignacio del Santo, Juan Camilo, Nico Serna, Jorqui, o Juan García quien anotó el primer ensayo de los Rhinos tras varias secuencias cerca de los palos. Los de azul y negro mantuvieron su ventaja en el marcador con un ensayo de maul antes del descanso, pero el partido estaba muy igualado.
En la segunda parte, los Rhinos salieron con ganas de más y primero fue un golpe de Jorqui y después, una gran intercepción de Pau Juncadella, que, adelantándose a los jugadores de Indus, se hizo con el oval y anotó bajo palos tras una carrera de 50 metros.
Tras ese arranque positivo de Majadahonda, Indus se hizo con el control y, dando cuenta de un gran juego al pie, empezó a meter en problemas al conjunto majariego. Varias patadas ’50/22′ seguidas de touch, maul y ensayo, permitieron a los roceños volver a ponerse por delante en el marcador.
En torno al minuto 60 a los Rhinos empezó a costarle mantener la buena inercia que habían desarrollado e Industriales aprovechó para alejarse en el marcador hasta el final 40-20.
Pese a lo duro de la derrota, el partido deja cosas positivas de cara a la competición, hay que seguir trabajando pero hay brotes que invitan a soñar con el objetivo de meterse en élite.