Los derbis son derbis, saben a derbi y se pelean como un derbi, y el del pasado sábado no iba a ser menos. Silicius Majadahonda se impuso 26 a 38 a Olímpico de Pozuelo en un duro encuentro disputado en el Valle de las Cañas. 

Las recién proclamadas campeonas de la Supercopa y de la Copa Ibérica se encontraron con un Olímpico compacto y peleón que puso las cosas complicadas hasta el último minuto.

La primera mitad se puede resumir en un intercambio de golpes. Si bien empezaban haciéndose notar las locales, la réplica llegaba con velocidad, con la velocidad de una jugadora tan determinante como María Marín que esquivando rivales se recorrió medio campo hasta posar el balón en ensayo. 

Siguió trabajando el equipo local y anotó dos ensayos para poner tierra de por medio en el marcador pero las Rhinas no bajaban los brazos y se sobrepusieron a la estocada con los ensayos de Cristina López y Alicia Guio para irse al descanso con la victoria mínima de 19-20. 

En la segunda mitad la tónica iba a ser similar y fue Olímpico quien anotó primero tras varias fases de delantera, tal y como se hicieron notar durante todo el encuentro.

Los cambios dieron más oxígeno a las de rojo y azul y se hicieron presentes. Luisina Contreras, desde la posición de mediomelé, se vistió de delantera para en un pick&go anotar el cuarto ensayo majariego.

Aún se iban a anotar dos ensayos más por las visitantes para conseguir la victoria y privar del punto bonus a las locales. Denisse Cortázar, sigue de dulce y fue la encargada de anotar los dos últimos tantos. El primero finalizando una jugada colectiva y el segundo, prácticamente sobre la bocina, tirando de casta, de juego con el pie y de velocidad para, en un balón que no era de nadie, anticiparse a las defensoras y posar el oval en la zona de marca dejando el resultado final en un 26-38. 

Un partido que se complicó por momentos pero del que se sacó una importante victoria para asegurar la segunda posición de la clasificación a falta de una jornada para que finalice la primera vuelta.